La receta de esta semana es capirotada de piloncillo que les aseguro que es una receta muy fácil de hacer y que además se hace con ingredientes de que todos tenemos en la casa. Yo se que les sonará extraño porque es una receta de semana santa.
Ya sé que a veces me adelanto a las fechas y otras veces me pierdo en la baba (Jajajaja) pero es que soy así, cuando me da la antojadera de algo lo tengo que hacer porque si no muero jaja. Además a nada ya estamos en Semana Santa.
Sí, soy muy exagerada no muero pero les cuento que en realidad, hace una semana se me antojaba algo dulce pero no sabía que…
Entonces un día mi prima me escribe en RRSS sobre una foto que puse donde yo era más peque y me contaba que ella revisando fotos viejas se dio cuenta que yo salgo en casi todas jaja que metiche soy. (Metiche: Que me meto en todos sitios sin llamarme)
Pues eso mi prima me hizo recordar lo unidas que estamos. Desde muy pequeñas mi hermana mayor y yo siempre íbamos con mis primas a todos sitios, yo la más pequeña de todas siempre me iba de lapa pegada a ellas.
Así que recordé una fecha que se aproxima; La de Semana Santa y como ya les dije iba de metiche, entonces siempre me iba con mi tía y mis primas a la iglesia en esa fecha.
Debo confesar que a esa edad no sabía exactamente lo importante que puede ser esas fechas para muchos, yo iba a todos sitios realmente a comer y de ahí fue que se me antojo hacer capirotada de piloncillo.
Por eso deben creerme cuando les digo que me encanta comer, es como una clase de embrujo jeje.
Bueno pues con todos esos recuerdos no podía aguantarme más las ganas de hacer este postre mexicano de piloncillo y que más da si aún falta para la Semana Santa al fin y al cabo podemos ir practicando con los postres de una vez.
Como siempre les digo que, si se les antoja algo que lo cocinen y se disfruta muchos más cuando ese antojo viene acompañado con recuerdos bonitos de tu familia o amigos.
Así que eso hice agarre mis recuerdos y me metí en la cocina, como siempre riendo sola de lo que me acordaba y es que como no, siempre con mi tía me pasaban unas cosas que vamos sigo riendo mientras les escribo.
Mi tía solía perderme casi siempre, claro como ya no tenía peques pues se le olvidaba que me llevaba, lo bueno que yo tenía como 8 o 10 añitos y que el pueblo donde vivía era pequeño.
Cuando no la encontraba en las procesiones de Semana Santa porque me había distraído comprando chucherías pues me iba a mi casa pero sin antes pasarla a ver y decirle que se había olvidado de mi y siempre me daba algo de comer para que la disculpará.
Claro que la disculpaba porque la quiero a montones y vamos que con un trocito de capirotada con miel de piloncillo, pasas, cacahuates y queso le perdono todo.
Creo que esta receta de capirotada es una de las recetas que más disfrute hacer y nos solo porque se hace bien rápido sino también porque me trajo recuerdos de esos días de Misa por Semana Santa que me encantan en mi pueblito.
Receta tradicional de capirotada con miel de piloncillo
Bueno y pensarán los que no son mexicanos ¿Qué es la capirotada?
Les cuento va…
La capirotada actualmente es un postre propio de la Semana Santa, se elabora con productos económicos y fáciles de conseguir, además de ser un postre sin horno y con poco tiempo de elaboración.
Se hace de dos formas, la primera capirotada de piloncillo y capirotada de leche. La forma tradicional de hacerla es de piloncillo ya que solía ser más económico que la leche y este postre mexicano es un postre muy humilde pero no por eso es delicioso.
La receta de capirotada tiene origen en la cocina española, es como las torrijas (En España) pero poco a poco esta receta fue teniendo lugar hasta ser parte de la gastronomía mexicana, para ser exacta, donde más se prepara es en la zona Norte del País.
Este fue uno de los primeros platos que se sirvieron en México tras la conquista, se dice que fue el plato que utilizó Hernán Cortés para envenenar a su amigo Francisco de Garay.
En ese entonces el plato era salado, se le ponía carne y aderezo, siendo el protagonista el pan pero en México tuvo más éxito la capirotada dulce que es la que actualmente se conoce.
Bueno como ahora ya saben de que va el tema, saben también que este plato era de esos platos humildes que se preparaban en los conventos tratando de reutilizar todos los ingredientes que se tuvieran a mano y para no desperdiciar.
En México se sustituyo la miel por miel de piloncillo que, es una miel de la azúcar de caña sin refinar. Si leyeron la receta de los puerquitos de poloncillo saben de que les hablo.
Entonces se adapto la receta de capirotada a ingredientes que fueran más fáciles de conseguir. Esta es la tradicional capirotada, solo se utilizaba el pan que quedaba de un día, un poco de pasas, frutos secos en este caso cacahuates (Cacahuetes en España), la miel de piloncillo aromatizada con clavo, canela o anís y se le daba un toque salado con el queso fresco.
Puede parecer raro que a un postre se le agregue queso pero de verdad que le da un toque muy especial a la capirotada así que les recomiendo que lo pongan.
Entonces, les decía antes que la capirotada se puede hace de leche también y la verdad que esta muy rica, pero esta vez me apetecía mucho hacerla tradicional.
La capirotada de leche regularmente de prepara con leche, obvio, y leche condesada para dar ese dulzor, además que se suele poner unos minutos en el horno para que quede más crujiente.
También se suele poner en esta receta tortillas de maíz, sí, les parece raro pero es verdad se pone una capa de tortillas en el fondo del refractario donde se cocinará, pero a mi no me gusta mucho con tortillas de maíz. Si quieren ponerlas solo tienes que estar calientes y poner la primera capa de tortillas, después ya el pan.
A mi en lo personal me hacía mucha ilusión preparar la que yo conozco con miel de piloncillo, además que en casa tengo la azúcar de piloncillo que compre en el supermercado para la receta de cerditos, así que aproveche.
Y ya contándoles un poco de que va esta receta ya saben que si tiene pan de un día lo guarden para hacer un postre fácil y rico. A mi me gusta mucho que el pan este durito para que tenga ese toque crujiente y que cuando muerdas el centro este suave por la miel de piloncillo que absorbe.
Otra cosa importante, si agregan cacahuates deben ser sin sal, yo compre con sal por equivocación una vez y no sabe igual.
Ahora si vamos a los ingredientes que ya verán que no tiene muchos y hacerlas es más fácil que nada.
Ingredientes:
- 1 1/2 barra de pan duro (5 bolillos)
- Mantequilla para barnizar el pan y tostar
- 150 g de queso fresco
- 700 ml de agua
- 175 g de azúcar de piloncillo (2 Panelas y/o piloncillos)
- 1 rama de canela
- 3 clavos de olor
- 75 g de pasas
- 75 g de cacahuates
Puden utilizar cualquier otro fruto seco.
Preparación:
- El primer paso es hacer la miel de piloncillo y para eso ponemos en un cazo a hervir el agua junto con el azúcar de piloncillo o los conos de piloncillos, la canela y los clavos de olor. Dejaremos hervir todo, colaremos para quitar la canela y reservaremos hasta que se enfríe.
- Después cortaremos el pan en rebanadas y en una sartén agregaremos un trozo de mantequilla o barnizaremos los trozos de pan y pondremos en la sartén a tostar perfectamente por ambos lados. Deben estar bien tostados para que no se desbaraten a la primera.
- Cuando tengamos todo el pan tostado por ambos lados pondremos en un refractario o cazuela de barro una capa de pan, agregamos un poco de la miel de piloncillo sobre el pan, pasas, cacahuates y queso y volvemos a poner otra capa de pan, repetimos el procedimiento hasta terminar el pan.
- Las capas dependerán del refractario que usen, a mí me quedaron dos capas en un refractario mediano. Verán que les sobra miel de piloncillo es conveniente que la agreguen para que quede un juguito que después podemos servir.
- El paso final es una vez terminada las capas agregaremos más pasas, queso, cacahuate y dejaremos reposar durante 15 minutos.
- Ahora sí, servimos unos trozos de pan con pasas, queso, cacahuates y agregamos un poco de la miel de piloncillo por encima.
Ahora ya me creen cuando les digo que es una receta económica, fácil y rápida de hacer.
No les llevará mucho tiempo y suele ser un éxito total porque nadie se resiste a una capirotada de piloncillo además que el sabor del pan con que queso y la miel es espectacular.
Espero que como a mi, esta receta les recuerde a su infancia y les transporte a los días de la Semana Santa en nuestro México.
- 1½ barra de pan duro (5 bolillos)
- Mantequilla para barnizar el pan y tostar
- 150 g de queso fresco
- 700 ml de agua
- 175 g de azúcar de piloncillo (2 Panelas y/o piloncillos)
- 1 rama de canela
- 3 clavos de olor
- 75 g de pasas
- 75 g de cacahuates
- El primer paso es hacer la miel de piloncillo y para eso ponemos en un cazo a hervir el agua junto con el azúcar de piloncillo o los conos de piloncillos, la canela y los clavos de olor. Dejaremos hervir todo, colaremos para quitar la canela y reservaremos hasta que se enfríe.
- Después cortaremos el pan en rebanadas y en una sartén agregaremos un trozo de mantequilla o barnizaremos los trozos de pan y pondremos en la sartén a tostar perfectamente por ambos lados. Deben estar bien tostados para que no se desbaraten a la primera.
- Cuando tengamos todo el pan tostado por ambos lados pondremos en un refractario o cazuela de barro una capa de pan, agregamos un poco de la miel de piloncillo sobre el pan, pasas, cacahuates y queso y volvemos a poner otra capa de pan, repetimos el procedimiento hasta terminar el pan.
- Las capas dependerán del refractario que usen, a mí me quedaron dos capas en un refractario mediano. Verán que les sobra miel de piloncillo es conveniente que la agreguen para que quede un juguito que después podemos servir.
- El paso final es una vez terminada las capas agregaremos más pasas, queso, cacahuate y dejaremos reposar durante 15 minutos.
- Después de este tiempo ya estará lista para servir.
Silvia Ramos dressingfood dice
Que ganas me han entrado de ellas, madre mía Lup
Que fotos más preciosas por otra parte!
Felicidades
Lupita Chanteiro dice
Muchas gracias Silvia, tú si que haces fotos preciosas
Rosío dice
Me hiciste recordar a mi bendita mami, que en Gloria de Dios Padre esté.
A mí en lo personal no me gustaba, pero desde que partió y tengo la oportunidad de probar ( no hacer ) me recuerdo de los rico que saboreaba dicho postre.
Esta Semana Santa la prepararé tal y como lo pones en tu receta y honrar a mi mami nuevamente.
Un abrazo y gracias por los recuerdos.
Lupita Chanteiro dice
Hola Rosío
Me alegro muchísimo que te traiga buenos recuerdos este receta